CHARLES DICKENS: EL POETA DE PICKWICK
"Aquí soy un gran éxito. Desde Dickens, nada parecido, me dicen. La gente me hace trizas, inmensas recepciones, cenas maravillosas, multitudes que esperan...". Esto fue lo que dijo Oscar Wilde, en los inicios del mil ochocientos ochenta, apenas puso un pie en los Estados Unidos. Y fue, cuarenta años antes, en este mismo país, cuando en días de crudo invierno, la gente se pasaba las noches enteras en la cola para coger sitio; gente que dormía en colchones que traían de sus casas y que comía lo que le servían de cualquier confitería cercana. La multitud se agolpaba para escuchar la voz del Maestro, del "poeta de Pickwick", que leyó en alguna iglesia de Brooklyn las aventuras de Oliver Twist y que fue, según el biógrafo Peter Ackroyd, "la primera celebridad global".
"Mi padre fue un buen hombre, pero muy manirroto, muy vividor, muy soñador...".
Charles John Huffam Dickens, considerado el más famoso de los escritores de la época victoriana, el creador de la novela social, nació en 1812 en Portsmouth, un puerto de la ciudad de Hampshire, en Inglaterra. Tenía apenas doce años, por ese entonces, la edad suficiente para comenzar a trabajar, cuando un frío día de febrero, ingresó a laborar en una fábrica de betunes donde pasaba diez a más horas pegando etiquetas. Esta oscura etapa marcaría para siempre su vida como escritor. Poco tiempo atrás, John, su padre, después de abandonar la prisión de deudores de Marshalsea, recibió, tras la muerte de su madre, una pequeña herencia y, aunque no era una gran fortuna, ayudó a que la situación de los Dickens pintara de mejor color pero, a pesar de ello, su madre, Elizabeth, le obligó a seguir trabajando en la fábrica, algo que Charles nunca le perdonaría hasta que...
"El Támesis nocturno de azul y oro...".
Después de un tiempo, la familia Dickens abandonó el condado de Kent para viajar a Londres y así poder buscar mejores escenarios. En Londres, donde el río cautivó la imaginación de poetas y cronistas; la ciudad que más tarde se convertiría en "su musa y a la que llamó su linterna mágica", Charles Dickens consiguió un trabajo como pasante en el bufete de Ellis & Blackmore y es allí donde le nace el querer ser periodista y el sueño de ser escritor. Más tarde sería reportero en el Doctor's Commons y luego cronista parlamentario. Era el año 1827 cuando el joven Dickens ingresó como periodista del vespertino True Sun al mundo del Parlamento Británico donde necesitaban cronistas que fueran ágiles y descriptivos con la pluma. Había aprendido taquigrafía y eso le serviría, desde algún oscuro rincón de la Cámara, ir anotando, como nadie lo había hecho antes, esos pequeños grandes detalles; el detalle de cómo visten los lores y cómo gesticulan, cómo leen y cómo entre ellos discuten sus discursos. Pronto sus crónicas se convierten en un éxito. La prosa de Dickens "es capaz de transmitir cada emoción y cada sentimiento". Más tarde este joven que ya tiene dieciocho años consigue un nuevo trabajo en The Mirror of Parliament y estando allí, The Mailing Magazine, le pide que escriba algunas crónicas sobre la vida cotidiana en Londres. Aceptó escribirlas pero, como no podía hacerlas con su nombre, las hizo bajo el seudónimo de Boz. Estas crónicas, llamadas SKETCHES BY BOZ, describen con precisión y grandes dosis de sentido del humor a los londinenses que acuden a los bares y a los lugares más emblemáticos de la capital. Los describe en la manera como hablan, como ríen o como visten y eso a ellos los tiene encantados. Si las crónicas parlamentarias fueron un éxito, éstas tuvieron ¡un rotundo éxito! Tanto, que los protagonistas de estas crónicas -los mismos ciudadanos- esperaban con ansias poder ir a comprar un ejemplar porque querían enterarse ¡cómo eran ellos! Un año más tarde, en 1834, trabajando como periodista político, un político prominente de la época, "reconoció la excelencia" de Dickens, mientras Dickens se siente abrumado de la popularidad de Boz. Al final de todo esto le ofrecen un libro con todo lo que, de manera graciosa y amena, ha ido contando y así, pronto se lo ve a Charles Dickens editado sus divertidas historias. Posteriormente publica su primera novela por entregas llamada LOS PAPELES PÓSTUMOS DEL CLUB DE PICKWICK. Corría el año 1836.
Ese mismo año a Charles Dickens se le ve muy interesado en una bonita muchacha. Se llamaba Catherine Thompson Hogarth y era hija de George Hogarth, dueño de The Mailing Magazine. Fue un matrimonio que se prolongaría durante veintidós años y que daría como fruto a diez hijos...
"Su escasa formación académica no había procurado grandes obras", diría un crítico.
Los padres de Dickens no pudieron dar un buen colegio a sus hijos y Charles no fue a la escuela sino hasta los nueve años. En su casa habían libros pero los "constantes desvaríos del padre" hicieron que éstos, junto a todo el mobiliario, fueran embargados. Pero en un rincón del estante quedó un libro que con el tiempo fue quizá uno de sus preferidos: El Quijote de la Mancha. Aunque años más tarde diría sobre uno de los suyos: "Tengo un hijo preferido, un hijo que es mi debilidad; este hijo se llama DAVID COPPERFIELD", su retrato autobiográfico. Charles Dickens se podría decir que fue el primero que publica sus novelas por entregas. Los "Old Dickensians" decían que los suscriptores de sus novelas aguardaban impacientes en la ciudad o en el campo la llegada del coche del cartero que, al paso de un cansado caballo, traía, mes tras mes, aquellas entregas azules que hoy son joyas cuyas hojas el tiempo ha tornado amarillentas. Sus lectores querían saber de las últimas peripecias del anciano y algo extravagante caballero Samuel Pickwick; querían saber si David se casó con Dora o escogió a Inés. Al año siguiente -año en que se inicia la era de esa mujer pequeña y dominante llamada Victoria-, Charles Dickens publica su primera gran novela OLIVER TWIST, una novela autobiográfica que vendió -algo fuera de lo común en esas épocas-, miles de ejemplares. Publica también sus NOTAS DE AMÉRICA, libro que recibió sendas críticas de parte de la sociedad norteamericana pues en ellas, denunciaba la esclavitud. TIENDA DE ANTIGÜEDADES apareció pocos años después y en 1843, con treinta y ún años, llega el CUENTO DE NAVIDAD el libro que describe con perfección la sociedad londinense y pasados tres años funda el Daily News. Pronto todos están extasiados con la pluma de Charles Dickens. También las editoriales se apuntan al éxito del escritor y copian y publican sus obras mientras Dickens dicta conferencias en las que aboga por cobrar los derechos de autor.
"... ahora, famoso, satisfecho y contento en mis ensoñaciones, es cuando rememoro con tristeza aquella época de mi vida y muchas veces me olvido que tengo una mujer y unos hijos, incluso que soy un hombre".
Charles Dickens que durante un viaje a París conoció a Alejandro Dumas y a Julio Verne, vivía contento y no necesitaba mucho para vivir como sus personajes, que piden poco a la vida y que, cobran vida propia fuera de sus libros y que no son como los personajes de Balzac que son siempre ávidos y ambiciosos y "arden en ansia codiciosa de poder". Personajes que nada les basta y que piden mucho a la vida. Y la vida de Dickens empezó a deteriorarse como también su matrimonio lo que provocó que la pareja, después de veintidós años, se divorciara. En 1865, el escritor se salvó milagrosamente de morir en un accidente ferroviario cuando viajaba en uno de los vagones en compañía de Ellen Ternan, posiblemente su amante. Esta horrible experiencia inspiró a Dickens a escribir EL GUARDAVÍAS. El accidente lo afectó tremendamente pero, sin embargo, no abandonó la pluma y ese año de 1865 empezó a escribir EL MISTERIO DE EDWIN DROOD, obra que dejó inconclusa y cuyo final provocó que se tejieran varias hipótesis. Charles Dickens murió de una apoplejía en junio de 1870: "Su muerte fue como si un rayo hubiese desgarrado el firmamento inglés" y a pesar que quería ser enterrado en la Catedral de Rochester -"de forma barata, sin ostentaciones y de forma estrictamente privada"-, fue enterrado con todos los honores en la Abadía de Westminster en la llamada "esquina de los poetas" al lado de Shakespeare a quien alguna vez quiso interpretar en una pequeña obra de teatro, pero una sencilla gripe se lo impidió.
Fuentes:
Charles Dickens, el novelista inglés más famoso del mundo, National Geographic • Charles Dickens en La Vanguardia • Tres Maestros: Balzac - Dickens - Dostoiewski, Stefan Zweig • Youtube: Charles Dickens
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